El Aceite Esencial de Frankincense tiene un aroma terroso y balsámico venerado por su capacidad de fomentar sentimientos de espiritualidad y fortaleza interior. Frankincense ofrece un gran abanico de posibilidades de uso y es uno de los aceites esenciales onmipresentes en la línea de cuidados para la piel.
· Aplica 1 ó 2 gotas sobre el rostro y el cuello para reducir imperfecciones y mejorar el aspecto del cutis.
· Difunde Frankincense y crea una sensación de conexión espiritual durante sus sesiones de yoga y meditación.
· Pieles secas: aplica entre 2 y 4 gotas para hidratar la piel.